Una de los mayores placeres que experimenta un guitarrista se da al tocar con equipos nuevos (el famoso GAS), sensación que no se compara con volver a tocar un instrumento inutilizado por el paso del tiempo y el uso, especialmente cuando también entra en juego ese valor sentimental que ofrece la guitarra con la que aprendiste a tocar.
La acumulación de óxido, suciedad en el mástil, electrónica inservible y otros problemas de estética y calibración tenían a esta strat Gibson Epiphone relegada al indecoroso status de adorno. Fue un agrado devolverla a la vida.
► Calibración completa del instrumento, incluyendo corrección de curvatura del mástil, posición del puente y silletas, altura de cuerdas y cápsulas, etc.
► Renovación completa del circuito electrónico con componentes de mayor calidad (conservamos las cápsulas originales).
► "Apantallado" del golpeador y cavidades de guitarra, para reducir el ruido e interferencias externas captadas por el circuito.
► Restauración y enmienda el trabajo de "relicado" que el dueño comenzó, para darle a la guitarra un aspecto de mayor uso y antigüedad
► Limpieza y remoción de óxido de todas las partes metálicas, y reemplazo de las inutilizables
► Limpieza y remoción de la suciedad y grasa acumulada en el diapasón, y aceitado del mismo
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